La Tracks de Cerdanya Gravel parte de dos recorridos distintos con 212 km y 285 km, pensados para ser realizados en tres y cuatro etapas respectivamente. Cada recorrido dispone además de dos tracks, uno con una proporción de asfalto/tierra de 50/50% y la otra con una proporción de 80/20%. Estos dos tracks estarán a disposición del biker que realice la ruta, de tal manera que en cada intersección los participantes podrán escoger si siguen la ruta por tierra o lo hacen por carretera. De esta forma, cada grupo podrá adaptarse la ruta a su medida. En cualquier caso, el ciclista descubrirá un territorio ideal para la práctica del gravel, donde las carreteras asfaltadas terminan a la llegada a las pistas de esquí, pero las pistas forestales con buen firme siguen para realizar pasos de montaña de ensueño, rodeados de lagos y bosques de abetos más allá de los 2000 m de altura.